Tema: Derecho Internacional
Por Juan Daniel Garay Saldaña.
Candidato a Doctor por la UNAM
En días recientes hemos observado en diversos medios de comunicación tanto nacionales como internacionales escenas en donde, por ejemplo, observamos a ciudadanos haitianos llegar a territorio mexicano, ya sea para permanecer en el país, para alcanzar el llamado “sueño americano” o la protección en Estados Unidos. Así mismo hemos sido testigos de sucesos similares de personas del Norte de África, queriendo llegar a los territorios españoles en Ceuta y Melilla, ubicados en Marruecos, o tratando de llegar en endebles embarcaciones a la isla de Lampedusa en Italia.
Las escenas sin duda son desgarradoras e impactantes, pero en este breve ensayo me gustaría explorar estos 2 conceptos (que son utilizados de forma indiscriminada por los distintos medios para lograr un mayor impacto en su audiencia) migración y refugio.
Las desgarradoras imágenes de la migración que vemos a diario nos recuerdan la imperiosa necesidad de proteger los derechos de los migrantes y refugiados por igual.
Si bien los anteriores términos se relacionan de forma directa, tenemos que separarlos y diferenciarlos para no solo comprenderlos desde la visión académica, sino para aprender a reconocerlos y darles el trato correspondiente desde la perspectiva de las políticas públicas.
En primer lugar, identificamos al fenómeno de la migración, reconociendo la migración interna (dentro de un país), la migración legal (tramitando los permisos correspondientes); pero, sobre todo, la migración ilegal, fenómeno que ahora nos ocupa. Desde este último enfoque, la Organización Internacional de la Migración (OIM) propone la siguiente definición cuando hablamos de migrante, “Designa a toda persona que se traslada fuera de su lugar de residencia habitual, ya sea dentro de un país o a través de una frontera internacional, de manera temporal o permanente, y por diversas razones.
Este término comprende una serie de categorías jurídicas bien definidas de personas, como los trabajadores migrantes; las personas cuya forma particular de traslado está jurídicamente definida, como los migrantes objetos de tráfico; así como las personas cuya situación o medio de traslado no estén expresamente definidos en el derecho internacional, como los estudiantes internacionales”[1].
La OIM reconoce que no existe una definición universal y que eso, por supuesto, empeora el problema y dificulta las soluciones. Lo cierto es que la mayoría señala que los migrantes salen de sus lugares de origen y se desplazan buscando un mejor nivel de vida.
Se requiere definir Migración y Refugio para dar soluciones a ambos fenómenos. En una acepción sencilla el migrante se desplaza buscando una mejor calidad de vida y el refugiado huye porque ve su vida en peligro.
En cuanto a la figura de Refugio y de El refugiado, hablamos de otro fenómeno que se entrecruza con el de la migración. Se confunde frecuentemente y además se mezclan en el mismo desplazamiento humano.
El refugiado se puede definir, de acuerdo con la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), como “personas que huyen de conflictos armados o persecución”. Se agrega además que “A menudo, su situación es tan peligrosa e intolerable, que cruzan fronteras nacionales para buscar seguridad en países cercanos, y así, ser reconocidos internacionalmente como “refugiados”, con asistencia de los estados, el ACNUR y otras organizaciones”.
Por último, se afirma que “Ellos son reconocidos precisamente porque es demasiado peligroso para ellos el regresar a casa, y necesitan asilo en otros lugares. Estas son personas, a quienes negarles el asilo, puede traerles consecuencias mortales”[1]. Es decir, son desplazados o forzados a dejar su lugar de origen por persecución del Crimen Organizado Trasnacional (COT) o por el propio Estado, poniendo en peligro su existencia.
¿Quiénes son los que observamos en las desgarradoras imágenes entonces? ¿Migrantes o Refugiados? Son ambos y es necesario identificar ambos fenómenos, ya que hay una delgada línea para reconocer cuál es cuál y otorgar la protección adecuada con base en el motivo de la salida de sus lugares de origen.
Los medios suelen utilizar indistintamente los términos migrante y refugiado, pero es importante reconocer las diferencias para poder diseñar políticas efectivas de protección ante estos fenómenos.
[1] Edwars Adrian. ¿’Refugiado’ o ‘Migrante’? ¿Cuál es el término correcto? En https://www.acnur.org/noticias/noticia/2016/7/5b9008e74/refugiado-o-migrante-cual-es-el-termino-correcto.html, consultado el 24/09/2021
[1] Definición de la OIM de acuerdo a su página: https://www.iom.int/es/migration/sobre-la-migracion, consultado el 24/09/2021